sábado, 29 de agosto de 2009

...Y los cielos brillaron intimidantes
Aquellos danzaban
desparramando su chispa por los campos en los que me encontré amarrado...
Despilfarraron su brillo, las estrellas caídas,
mientras se estampaban en la tierra húmeda...

Se sintió un aliento lejano,
un pequeño aroma perfecto...
inundado por mi fascinación, alcance las luces que me abandonaron al nacer...
Ignoré las trampas de sal, y entendí que las alas mudan cada vez que se crea el universo.

Quise entender, y entendí,
quise aprender y aprendí,
quise enseñar y enseñe,
pero aún no llegaba a ti...

Tuve que tragarme el tiempo,
valorar el sufrimiento, absorber los sentidos,
ahogarme...
Y Amarte....

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